La siguiente es una transcripción de la carta dirigida al Presidente de Conicyt y a la Directora de Fondecyt, en reclamo a las restricciones impuestas a la colaboración internacional por las bases de las últimas convocatorias Fondecyt:
Estimada Sra. Vidales, estimado Sr. Hamuy:
Mediante la presente carta formal, un amplio espectro de la comunidad matemática nacional aglutinada en la Sociedad de Matemática de Chile y representada por su directorio desea manifestar su enorme preocupación por algunas modificaciones introducidas en las bases de los últimos concursos FONDECYT regular y FONDECYT iniciación. En específico, nos referimos a las siguientes restricciones que, a nuestro juicio, afectan seriamente la factibilidad de ejecución de los proyectos en el área de matemáticas:
- “Se financiarán viajes de colaboración internacional en solamente uno o dos años del proyecto, independientemente de su duración”.
- “Se financiará máximo un viaje por año al extranjero, por concepto de reuniones científicas o congresos, para un investigador(a) del equipo”.
A diferencia de otras ciencias en las que el pilar principal es la experimentación, en matemáticas, la mayor parte del financiamiento se utiliza en establecer y reforzar redes de colaboración con pares de otras latitudes. La asistencia a conferencias y las estadías de investigación constituyen para nosotros la principal fuente de inspiración para encontrar y abordar nuevos problemas. Nuestra disciplina, nuestros temas de investigación y las revistas en las que publicamos son universales, por lo que quien no establezca ni solidifique lazos de cooperación internacional difícilmente progresará.
Es más, desde hace años, la comunidad matemática nacional en su conjunto ha hecho esfuerzos importantes en crear y fortificar redes de colaboración. Es así como la Sociedad de Matemática de Chile es socio activo de la Unión Matemática de América Latina y El Caribe y del Consejo Matemático de las Américas. Ambas organizaciones involucran países del continente americano y realizan sendos encuentros cuatrienales de gran impacto en la región. Junto con esto, desde hace unos años hemos impulsado la realización de encuentros conjuntos con la Unión Matemática Argentina, con sede alternante entre ambos países. El primero de estos congresos fue celebrado en Valparaíso en 2016 (con el apoyo de CONICYT), y el segundo se llevará a cabo en Mendoza en 2019. Recientemente, hemos sido invitados para celebrar encuentros del mismo tipo con la real Sociedad Matemática Española. De manera aún más importante, Chile es miembro de la Unión Matemática Internacional, entidad que acaba de subir a nuestro país de categoría en la víspera del Congreso Internacional de Matemáticos (también de carácter cuatrienal): https://somachi.cl/blog/2018/07/30/chile-sube-de-categoria-en-el-ranquin-de-la-union- matematica-internacional/. Se trata de un logro que fue celebrado por toda la comunidad nacional, pues constituye un reconocimiento del más alto estamento mundial al avance de la matemática en nuestro país y su presencia en esferas internacionales.
Evidentemente, gran parte de estos esfuerzos se dilapidarán dadas las nuevas restricciones impuestas por CONICYT, las cuales atentan gravemente contra el desarrollo de nuestra disciplina. En caso de persistir en ellas, es indudable que seremos testigos de un retroceso en el desarrollo de la matemática (y de la ciencia en general) en nuestro país, pues seremos incapaces de atraer investigadores internacionales a nuestras universidades y (lo que resulta más preocupante) nuestros investigadores jóvenes en el extranjero difícilmente pensarán en volver a Chile a desarrollar sus carreras académicas.
Dado lo anterior, solicitamos que en las próximas convocatorias de FONDECYT estas dos restricciones sean eliminadas y que, en el futuro, cualquier modificación de las bases sea decidida tomando en cuenta las prácticas y realidades de las diferentes disciplinas científicas.
Atentamente, Directorio SOMACHI.